Este nuevo dispositivo contará con una pantalla curva y flexible de 5,7 pulgadas, la misma medida que la recién estrenada "phablet" Galaxy Note 3, y tendrá una cámara delantera y trasera de 13 megapixeles y un procesador de cuatro núcleos y 2,3 gigahercios.
Ya ha llegado el primer móvil del mercado con pantalla curvada, y lo hace de la mano de Samsung. La compañía coreana ha vuelto a mostrar su liderazgo en este segmento con el lanzamiento del Samsung Galaxy Round. Este terminal cuenta con una pantalla cóncava de 5,7 pulgadas que promete mucha guerra, ya que está diseñada para ser más resistente frente a golpes y resultar más cómoda de agarrar. Además, la compañía asiática ha conseguido introducir este panel en un diseño muy fino y ligero de tan solo 7,9 milímetros de grosor y algo más de 150 gramos de peso. Tampoco desmerecen el resto de especificaciones de este terminal, muy similares a las que podemos disfrutar en el Samsung Galaxy Note 3.
Así, por ejemplo, tendremos un procesador de cuatro núcleos a 2,3 GHz o una potente memoria RAM de 3 GB, con la que podremos correr numerosas aplicaciones sin que se resienta el sistema. En el campo de la cámara, se repite un objetivo trasero con buena resolución de 13 megapixels, autoenfoque y flash y una cámara delantera de 2 megapixels. Uno de los pocos puntos que afean este excepcional móvil está en su batería, que baja desde los 3.200 miliamperios del Galaxy Note 3 a los 2.800 miliamperios. Por lo demás, estamos ante un terminal que puede sentar cátedra en los futuros lanzamientos de móviles con pantallas curvadas que lleguen al mercado. Eso sí, está por ver si estas formas convencen al gran público. Te contamos todos los argumentos de Samsung tras el salto.
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